Alexandre de Juniac, Director General y CEO de IATA realizó importantes declaraciones donde ha repasado la actualidad del mercado de aviación y ha compartido su visión sobre esta temporada. El funcionario afirmó: “La demanda de pasajeros internacionales se redujo en un 75%, la demanda interna en casi la mitad. A la carga aérea le fue mejor con la disminución limitada al 10%. Eso lo convierte en una fuente de ingresos para muchas aerolíneas y rutas. Pero el punto general a destacar en 2020 es que experimentó la mayor caída en la demanda. Y cualquier recuperación se estancó en noviembre”.
“Nuestro pronóstico es que el tráfico regrese a la mitad de los niveles de 2019 en 2021. Pero la proliferación de restricciones a los viajes que hemos visto desde principios de año podría hacer que incluso esa modesta perspectiva sea muy desafiante”.
“Frente a estas nuevas restricciones, nuestro llamado a una asociación con los gobiernos es aún más esencial. Habrá un punto de inflexión en esta crisis. Y es importante estar preparado para ello”.
“No creo que nadie prevea un mundo libre de COVID-19 en el corto plazo. Ciertamente no en los próximos meses o incluso dentro de este año. Pero nuestra capacidad para gestionar el riesgo está aumentando a medida que más personas se vacunan y se amplía la capacidad de prueba”.
“Con el tiempo, estaremos en un punto en el que estas y otras medidas darán a los gobiernos la seguridad de que el riesgo de reiniciar nuestras vidas, incluidos los viajes, es tolerable, reconociendo también los importantes beneficios sociales y económicos que están en juego. Estamos ansiosos por trabajar con los gobiernos como socios para comprender cuáles serán los puntos de referencia y las condiciones para una decisión que devuelva a las personas su libertad de movimiento”.
“¿Por qué estamos tan ansiosos por un plan? Para que no perdamos un minuto en reconectar el mundo cuando sea seguro hacerlo. Una industria de la aviación que funcione agregará un impulso vital a la recuperación económica. De hecho, sin la aviación, la recuperación probablemente no sea posible. Todos hemos visto demasiadas historias sobre la terrible pérdida de puestos de trabajo y el sufrimiento humano en el sector de los viajes y el turismo. Las llamadas “vacaciones de estancia” y el turismo local no son la respuesta. Solo la aviación podrá impulsar una recuperación”.
“Algunos gobiernos ya han respondido positivamente a una asociación con la industria. En el Reino Unido, por ejemplo, estamos trabajando con la asociación de aerolíneas local para proporcionar un marco recomendado. Y esto fue por invitación del gobierno, una señal muy positiva de que el enfoque de asociación generará un valor significativo”.
“En los EE. UU., IATA representa a las aerolíneas internacionales en las consultas interinstitucionales casi diarias de la Administración Biden sobre las medidas COVID. Y en América Latina, hoy anunciaremos un acuerdo con el Gobierno de Panamá y Copa Airlines para asociarnos con nosotros en la prueba del IATA Travel Pass. Esta es la primera aerolínea de las Américas en poner a prueba el programa y el primer gobierno del mundo en apoyarlo públicamente. La prueba está programada para comenzar en marzo en vuelos seleccionados de Copa desde el centro de la aerolínea en la ciudad de Panamá”.
“Mientras tanto, las aerolíneas siguen luchando por sobrevivir. En los últimos días hemos visto a miles de empleados de aerolíneas en Estados Unidos recibir la difícil noticia de que sus puestos de trabajo podrían desaparecer el 1 de abril cuando finalice el actual subsidio salarial”.
“Los paquetes de ayuda han sido un salvavidas vital para las aerolíneas de todo el mundo. Los gobiernos han aportado 200.000 millones de dólares para ayudar a mantener viable la industria. Pero incluso esta asombrosa cantidad no permitirá que la industria siga adelante si tenemos restricciones de viaje severas hasta bien entrado el 2021. Se necesitarán más”.
“No existe una fórmula única para la ayuda que se necesita. Pero lo que es de vital importancia es que los gobiernos comprendan la situación específica de las aerolíneas en su mercado y brinden el apoyo adecuado, un apoyo que no aumente los niveles de deuda ya elevados. Y este mensaje también se envía a los mecanismos de financiación regionales en el mundo en desarrollo. Cuando los gobiernos no tienen los recursos, es posible que las organizaciones internacionales de financiación, como los bancos de desarrollo, deban intervenir”.
