Un proceso para convertir desechos de las plantas de la agricultura y de la explotación de la madera en combustible de calidad para aviones fue diseñado por un grupo de científicos chinos.
Este nuevo combustible podría ayudar a reducir las emisiones de dióxido de carbono de aviones y cohetes.
De acuerdo a los detalles del proyecto, publicados en la revista Joule, se trata de un polímero barato, renovable y abundante en las paredes celulares de la planta puede producir combustible de aviación de alta densidad.
“Nuestro biocombustible es importante para mitigar las emisiones de CO2 porque se deriva de la biomasa y tiene una mayor densidad que los combustibles de aviación convencionales”, señaló uno de los autores del documento, Li Ning, científico investigador del Instituto de Física Química de la Academia de Ciencias de China.
La utilización de combustible de aviación de alta densidad puede aumentar significativamente el alcance y la carga del avión sin cambiar el volumen de lubricante en el tanque, señala el estudio.
El equipo de Li utilizó celulosa de agropiro (hierba de trigo) en el laboratorio para producir una mezcla de químicos C12 y C18 con un punto de congelamiento bajo y una densidad cerca de 10 por ciento mayor que la de los combustibles de avión convencionales.