Santo Domingo, R.D., agosto 24, 2021.- El presidente de la Republica, Luis Abinader, dio a conocer la nueva Ley de Aduanas, con el objetivo de eficientizar, modernizar y adaptar la anterior a las normas y estándares internacionales, conformes a la realidad de la legislación nacional.
La nueva ley adapta la legislación aduanera con los acuerdos internacionales comerciales y aduanales suscritos por el país en los últimos 30 años y reduce la discrecionalidad del director de la DGA.
Se recuerda que la pieza fue sometida por el legislador oficialista, Alexis Victoria Yeb, vía el Senado de la República y posteriormente fue convertida en ley por la Cámara de Diputados.
La Ley de Aduanas, está compuesta por 420 artículos destinados a regular el régimen aduanero dominicano, estableciendo las distintas directrices sobre las cuales se sustentará la institución. El nuevo texto legal tiene como objetivo modernizar y hacer más segura la DGA, así como tener una norma más exclusiva, aumentar la seguridad y el control de mercancía.
El director de la Dirección General de Aduanas, Eduardo Sanz Lovatón, expresó que este es uno de los grandes logros que pretende alcanzar en su gestión al frente de la institución, y que esta nueva ley representa un avance hacia convertir a República Dominicana en el Hub logístico de la región.
“La promulgación de esta nueva ley es otra meta alcanzada, impulsada por la actual gestión, que desde el primer día ha generado la confianza que se necesitaba para trabajar unidos en favor del avance y desarrollo de nuestro país. Agradecemos a la Cámara de Diputados, al Senado y al presidente Luis Abinader, por hacer de esta nueva ley una realidad.”, resaltó Sanz Lovatón.
De su lado, el presidente de la República valoró esta nueva iniciativa legislativa que servirá para implementar más controles, y colocar al país a la altura de otras naciones en materia de comercio internacional. Dijo a su vez, que con esta revolucionaria reforma se pretende alcanzar un mayor grado de simplificación y armonización en los regímenes y procedimientos aduaneros, eliminando así, engorrosos trámites burocráticos que afectan la integridad y la operatividad aduanera.
“Esta ley da mayor seguridad jurídica a los actores del comercio, ya que elimina discrecionalidades, y la misma, está estructurada sobre la base de una secuencia lógica, excluyendo la dispersión hasta hoy existente, se legisló con rigor técnico sobre el nacimiento de la obligación tributaria aduanera y sus regímenes, haciéndola compatible con los lineamientos de política comercial de la Organización Mundial del Comercio (OMC), entre otros aspectos no menos relevantes”, expresó el Mandatario.
Abinader agradeció a todos aquellos que se involucraron y aportaron durante años para lograr que la Ley de Aduanas sea hoy una realidad. Destacó que este ejercicio es una muestra más del compromiso que tiene su gestión con la institucionalidad, la modernización del Estado dominicano, y el desarrollo económico de la nación.
Novedades
La nueva Ley de Aduanas castiga el delito de lavado en el comercio de mercancías, crea la Procuraduría Especializada para investigación de los crímenes y delitos aduaneros. También procura que la DGA participe más en los procesos de la integración económica internacional, acogiéndose a las nuevas normas del comercio exterior.
Agrega nuevas definiciones relativas a los acuerdos multilaterales medioambientales, Aduanas Verdes, Tipos de Aforo, Documental, Físico, Cadena de Frío, Transporte Internacional, Regímenes Aduaneros Económicos, Términos de Comercio Internacional de Conformidad a los “incoterms” o reglas de la ICC para el uso de términos comerciales internacionales; Incorpora el uso de la firma electrónica o digital; Agrega el pago a través de entidades bancarias.
También incorpora la transmisión de la documentación previo a la llegada de los medios de transporte, acepta la Carta de Porte Marítimo o “Sea waybill” como un documento de embarque físico o electrónico.
En cuanto a las atribuciones se agregan medidas sobre lavado de activos, vía comercio de bienes, siguiendo recomendaciones del Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (GAFILAT); La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) OMA, entre otros.