La Organización Internacional de Transporte Aéreo (ICAO, por sus siglas en inglés) propuso este martes un conjunto de medidas para minimizar el riesgo de contagio del coronavirus en aeropuerto y aviones, y permitir que los viajeros vuelvan a volar con confianza.
La distancia interpersonal es la primera medida, pero se aclara que ésta debe practicarse donde sea posible y que dentro de los aviones habrá de adoptar medidas que disminuyan al máximo el riesgo, incluido el uso de mascarillas y viseras protectoras del rostro, que deberían usar tanto pasajeros como el personal de cabina.
El interior de los aviones debe ser limpiado y desinfectado por completo, en particular aquellas áreas donde hubo contacto humano.
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) apoyó de inmediato las propuestas y su director general, Alexandre de Juniac, comentó que “es vital que durante esta crisis se restauren las conexiones aéreas a medida que las fronteras y las economías se reabren”.
“Contamos ahora con que los gobiernos apliquen las recomendaciones lo antes posible”, subrayó en un comunicado emitido desde la sede de la IATA en Ginebra.
Otras medidas que preconiza la ICAO son las evaluaciones de salud, que podrían incluir declaraciones juradas antes y después del vuelo, la toma de la temperatura y la observación visual por parte de “profesional sanitarios”, lo que implicaría contar con su presencia en los aeropuertos.
Asimismo se propone que tanto los pasajeros como los empleados de la aviación pongan al día sus datos de contacto (probablemente como parte de la declaración jurada), lo que facilitaría el rastreo de contactos de una persona que luego se revele que estaba infectada.
La organización también recomendó que se hagan test de diagnóstico que sean eficaces y cuyo resultado pueda conocerse en tiempo real o muy corto, cuando éstos estén disponibles.
La acumulación de estas medidas “debería dar a los viajeros y a las tripulaciones la confianza necesaria para volver a volar”, opinó De Juniac.