Más de 85 mil pasajeros han circulado por las terminales del país a través del Aeropuerto Internacional de Las Américas (Aila), Gregorio Luperón, de Puerto Plata y Joaquín Balaguer, en el Higüero, Santo Domingo Norte.
Estas terminales son administradas por el consorcio Aeropuertos Dominicanos Siglo XXI (Aerodom), donde hay un protocolo para los viajeros que se desplazan desde sus hogares o desde las terminales en el horario del toque de queda.
El director de Comunicaciones de Aerodom, Luis José López, dijo que en estos días han tenido una demanda superior a la que habían anticipado, ya que la mayoría de las aerolíneas han lanzado ofertas para estimular el servicio.
En el Aila, la administración ha tenido que utilizar la colaboración de la Policía Nacional y del Cuerpo Especializado de Seguridad Turística (Cestur) para controlar a las personas que llegan al aeropuerto a despedir o recibir familiares, quienes intentan penetrar a la terminal en grupo y sin ninguna medida.
Pasajeros y el toque de queda
López manifestó que existen requisitos exigidos por las autoridades durante el horario del toque de queda, sobre todo en las horas de la noche y que se está permitiendo que una sola persona vaya a recibir o a despedir al viajero.Él mismo debe llevar consigo el itinerario de vuelo de la persona que buscará o llevará y así demuestra que su movimiento en hora nocturna es con un fin necesario.
Explicó que en principio de las medidas hubo pasajeros que llegaron retrasados a sus vuelos, debido a que fueron detenidos e investigados en el trayecto hacia la terminal, pero dijo que se ha ido coordinando con las autoridades, sobretodo a las que están en los puntos de retén, a quienes se le ha pedido la colaboración.
“En su momento, pasajeros estuvieron que comunicarse con el aeropuerto y sus líneas aéreas, porque aun presentando el ticket fueron detenidos por desconocimiento del oficial al mando en ese punto, situación que se ha ido corrigiendo”, informó el funcionario.
Recordó que existen medidas para los pasajeros internacionales moverse durante el toque de queda, siempre y cuando se dirijan hacia las terminales a tomar un vuelo, o salgan de las mismas hacia sus hogares al regresar del exterior.
Para estas facilidades todas las aerolíneas han flexibilizado su política de cambio y penalización. Ninguna está cobrando tarifas adicionales por el cambio del vuelo, esto para facilitar que si alguna persona se encuentra con el inconveniente y, sobretodo, si presenta algún síntoma que pudiera ser sospechoso de COVID-19, pueda cambiar el vuelo para el momento que se sienta seguro de su estado de salud.